Sta Mª Josefa Rossello

Nació el 27 de mayo 1811 en Albisola Marina Italia patio que daba a la casa de la Rossello en la parroquia nuestra señora de la concordia fue bautizada el mismo día de su nacimiento con el nombre de “Benita”.

Fue la cuarta hija de una numerosa familia de NUEVE hermanos. Benita no tuvo bienes materiales pues sus padres (Bartolomé Rossello y María Dedone) eran modestos alfareros, pero no faltó en ellos la gran riqueza de la fe y de la piedad. Desde pequeña se DESTACÓ por su piedad y su gran devoción. Muy pronto, iluminada por el Señor, soñaba con entregarse a él en la Tercera Orden Franciscana. 

Benita, aprendió a moldear la arcilla y se hizo cargo de sus hermanos menores, permitiendo así que su madre se dedicara a sus numerosas ocupaciones. Su deseo juvenil fue siempre evitar todo pecado, hacer el bien al prójimo, salvar las almas, hacerse santa… Siendo muy joven sintió nacer poco a poco en su corazón el deseo de una vida más perfecta que le permitiera VIVIR MÁS UNIDA A DIOS.

El Obispo de Savona-Noli, Monseñor Agustín María De Mari buscaba: "almas piadosas y misericordiosas que, sintiendo compasión por las hijas abandonadas del pueblo, las recogiera, Educara y las FORMARA en el trabajo, la religión y la virtud."

El 22 de octubre de 1837, la Madre Rossello y sus primeras compañeras asumen el nombre de "Hijas de Nuestra Señora de la Misericordia” nombre que encierra toda un OPCIÓN DE VIDA: Difundir en el mundo la misericordia de Dios; ser como María, instrumento de salvación.

Desde los primeros años la comunidad ha estado animada por un excelente espíritu de sencillez, humildad, laboriosidad, en todo, son ejemplo a imitar" las Hijas de la Misericordia reciben las bendiciones de Dios, que dan al Instituto una admirable fecundidad en el mundo de hoy.